Diario de Cuba debiera decir de una vez quién los paga antes de manipular mis palabras.
Diario de Cuba vuelve a retomar palabras de un post de este blog y citándolo fuera de contexto. Cita precisamente donde dije, de manera burlona, que cobraría 1000 euros por las huelgas promocionadas y 500 por los cacerolazos. Cosa que desde luego nunca he hecho ni haré. Y que escribí en tono de broma.
En este blog se le ha dado seguimiento y publicidad de manera gratuita, desinteresada y abierta, a todas las personas que luchan por la libertad de Cuba, en muchísimas ocasiones antes que DDC lo hiciera, de hecho, y en más de una oportunidad DDC ha tomado la información de este blog sin citarlo siquiera.
Bien, este blog no es subvencionado por ningún gobierno, nadie me paga por hacerlo, y lo hago yo sola. Tampoco cobro nada por mi trabajo en mi blog de El Economista ni cobro del blog de El Universal. Sin embargo, tanto DDC como cualquier otro medio de prensa que se ocupa de Cuba, cobran.
DDC no sólo cobra, además se pretende el diario del exilio, y el de Cuba, y el de los cubanos, sin aclarar de manera transparente quiénes los subvencionan, con qué pagan a sus asalariados. ¿Como es posible que un diario como ése, en medio de la crisis que vive España, pueda pagarle salarios a empleados, y colaboraciones a personal que vive fuera de España, cuando diarios tan importantes como El Economista no puede pagar a sus periodistas y columnistas? ¿Cuáles son los privilegios de los que goza este diario, bajo cualquier gobierno, sea socialista o de derechas, que mientras otros periódicos más importantes deben cerrar y disminuir personal, éste no?
De modo que no sé con qué moral anuncian manipulando suciamente mis palabras que yo cobraré 1000 euros -cosa que debería hacer de verdad y no decirlo solamente en broma como lo hice, viendo todos los que se mojan con el dolor de los cubanos- sin hacer la salvedad de que se trataba de una broma, cuando ellos todavía no dicen, y no han aclarado limpiamente quiénes les pagan, y cuánto cobran por hacer el trabajo divisionista que hacen, excluyendo a escritores y artistas que no pertenecen a su grupito promotor del raulismo light y del levantamiento del embargo, modificando las noticias a su conveniencia sin ningún tipo de profesionalismo y seriedad. ¿Así es como se venden de manera pomposa como el único diario cubano válido, en una especie de Granma navegando entre dos aguas, o en las dos?
Mientras que DDC cobra por una página web mediocre, con ínfulas de imprescindible, ni este blog, ni ninguno de los demás que hago (en El Economista, en El Universal) son remunerados, entre otras cosas porque España necesita un esfuerzo extraordinario en estos momentos cruciales de crisis económica. Ese esfuerzo se me pidió desde hace un año y acepté seguir escribiendo por amor al periodismo. Por otro lado, lo primero que debe hacer un diario que se respete es respetar a los demás, incluso a los que consideran sus enemigos. Yo, por supuesto, soy un enemigo que les conviene, pues con toda evidencia les suma lectores hablar mal de mí, difamar y calumniarme, como hacen a menudo. O como hacen esos “comentaristas” que pretenden ripiarme -siempre los mismos, por cierto-, y que constituyen el grupito precario y vergonzoso pegagorras que sólo defienden y apoyan a los opositores cubanos y a la causa de Cuba cheque mediante.
Zoé Valdés.
Con mi firma y dando la cara, y no escondiéndome bajo el machón colectivo de un diario.
Fuente: http://zoevaldes.net/2012/09/27/diario-de-cuba-debiera-decir-de-una-vez-quien-los-paga-antes-de-manipular-mis-palabras/
Diario de Cuba vuelve a retomar palabras de un post de este blog y citándolo fuera de contexto. Cita precisamente donde dije, de manera burlona, que cobraría 1000 euros por las huelgas promocionadas y 500 por los cacerolazos. Cosa que desde luego nunca he hecho ni haré. Y que escribí en tono de broma.
En este blog se le ha dado seguimiento y publicidad de manera gratuita, desinteresada y abierta, a todas las personas que luchan por la libertad de Cuba, en muchísimas ocasiones antes que DDC lo hiciera, de hecho, y en más de una oportunidad DDC ha tomado la información de este blog sin citarlo siquiera.
Bien, este blog no es subvencionado por ningún gobierno, nadie me paga por hacerlo, y lo hago yo sola. Tampoco cobro nada por mi trabajo en mi blog de El Economista ni cobro del blog de El Universal. Sin embargo, tanto DDC como cualquier otro medio de prensa que se ocupa de Cuba, cobran.
DDC no sólo cobra, además se pretende el diario del exilio, y el de Cuba, y el de los cubanos, sin aclarar de manera transparente quiénes los subvencionan, con qué pagan a sus asalariados. ¿Como es posible que un diario como ése, en medio de la crisis que vive España, pueda pagarle salarios a empleados, y colaboraciones a personal que vive fuera de España, cuando diarios tan importantes como El Economista no puede pagar a sus periodistas y columnistas? ¿Cuáles son los privilegios de los que goza este diario, bajo cualquier gobierno, sea socialista o de derechas, que mientras otros periódicos más importantes deben cerrar y disminuir personal, éste no?
De modo que no sé con qué moral anuncian manipulando suciamente mis palabras que yo cobraré 1000 euros -cosa que debería hacer de verdad y no decirlo solamente en broma como lo hice, viendo todos los que se mojan con el dolor de los cubanos- sin hacer la salvedad de que se trataba de una broma, cuando ellos todavía no dicen, y no han aclarado limpiamente quiénes les pagan, y cuánto cobran por hacer el trabajo divisionista que hacen, excluyendo a escritores y artistas que no pertenecen a su grupito promotor del raulismo light y del levantamiento del embargo, modificando las noticias a su conveniencia sin ningún tipo de profesionalismo y seriedad. ¿Así es como se venden de manera pomposa como el único diario cubano válido, en una especie de Granma navegando entre dos aguas, o en las dos?
Mientras que DDC cobra por una página web mediocre, con ínfulas de imprescindible, ni este blog, ni ninguno de los demás que hago (en El Economista, en El Universal) son remunerados, entre otras cosas porque España necesita un esfuerzo extraordinario en estos momentos cruciales de crisis económica. Ese esfuerzo se me pidió desde hace un año y acepté seguir escribiendo por amor al periodismo. Por otro lado, lo primero que debe hacer un diario que se respete es respetar a los demás, incluso a los que consideran sus enemigos. Yo, por supuesto, soy un enemigo que les conviene, pues con toda evidencia les suma lectores hablar mal de mí, difamar y calumniarme, como hacen a menudo. O como hacen esos “comentaristas” que pretenden ripiarme -siempre los mismos, por cierto-, y que constituyen el grupito precario y vergonzoso pegagorras que sólo defienden y apoyan a los opositores cubanos y a la causa de Cuba cheque mediante.
Zoé Valdés.
Con mi firma y dando la cara, y no escondiéndome bajo el machón colectivo de un diario.
Fuente: http://zoevaldes.net/2012/09/27/diario-de-cuba-debiera-decir-de-una-vez-quien-los-paga-antes-de-manipular-mis-palabras/