Explicación por el embajador Ronald D. Godard, asesor principal de área de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, sobre el voto en la Resolución Cuba en el Salón de la Asamblea General
Nueva York, NY 3 de noviembre de 2012
Señor presidente,
Estados Unidos apoya firmemente el deseo del pueblo cubano de determinar libremente su propio futuro. Sin embargo, es el gobierno cubano el que continúa negándole esta aspiración.
Como otros Estados Miembros, Estados Unidos determina su conducta en las relaciones económicas con otros países en concordancia con sus intereses nacionales y principios. Nuestra política de sanciones contra Cuba es tan solo una de las herramientas en nuestro esfuerzo en general para impulsar el respeto a los derechos humanos y las libertades básicas con las cuales la propia Organización de las Naciones Unidas está comprometida. Por lo tanto nos declaramos en oposición a esa resolución.
Señor presidente,
La prioridad de la administración Obama es empoderar a los cubanos para que puedan determinar libremente su propio futuro. La herramienta más eficaz que tenemos para lograr esto es crear contactos entre el pueblo cubano y el pueblo estadounidense. Estas conexiones les permiten tener a los cubanos el apoyo y las herramientas que precisan para seguir adelante con independencia de su gobierno. Los ciudadanos de Estados Unidos que realicen viajes bien definidos y con propósito, son los mejores embajadores de nuestros ideales democráticos. Los cientos de miles de cubanoestadounidenses que han enviado remesas y viajado a la isla desde que facilitáramos los medios para ello a principios de esta administración son un componente esencial en la estrategia para asegurarse de que los cubanos tengan las oportunidades que se merecen. Las políticas de la administración para los viajes, remesas y las políticas de persona a persona, están ayudando a los cubanos al proporcionar fuentes de información alternas, aprovechando las oportunidades emergentes para el empleo por cuenta propia y la propiedad privada, y fortaleciendo una sociedad civil independiente.
En contraste la resolución sobre Cuba trata de identificar a un chivo expiatorio externo de los problemas económicos de la isla, que son principalmente causados por las políticas económicas que el gobierno cubano ha aplicado desde hace medio siglo. Mientras notamos y acogemos favorablemente los recientes cambios en Cuba para permitir un mayor empleo por cuenta propia y liberalizar el mercado de bienes raíces, Cuba todavía tiene uno de los sistemas económicos más restrictivos en el mundo. Independientemente de la política de Estados Unidos es poco realista esperar que la economía cubana prospere mientras el gobierno cubano no abra los monopolios estatales a la competitividad privada, faculte plenamente a los empresarios cubanos, respete los derechos de propiedad intelectual, permita el acceso irrestricto a Internet, y adopte las políticas macroeconómicas que han contribuido al éxito económico de muchos de los países vecinos de Cuba en América Latina.
Señor presidente,
Quiero señalar claramente que de hecho Estados Unidos es un profundo y leal amigo del pueblo cubano. En 2011 el pueblo cubano recibió alrededor de 2.000 millones de dólares en remesas, lo cual fue posible debido a las políticas de la administración Obama. En 2011 empresas de Estados Unidos exportaron productos agrícolas, artefactos médicos, medicamentos y artículos humanitarios a Cuba por valor de 352 millones de dólares. De acuerdo al recuento del propio gobierno cubano, Estados Unidos es de hecho uno de los principales socios comerciales de Cuba. Además, en 2011 Estados Unidos autorizó 1.200 millones de dólares en ayuda humanitaria privada en forma de paquetes de regalos llenos con alimentos y otras necesidades básicas, así como donaciones no agrícolas y otras médicas. Lejos de restringir la ayuda al pueblo cubano estamos orgullosos de haber sido unos de los principales abastecedores de ayuda humanitaria, y dado que compartimos con el pueblo cubano la experiencia de haber padecido la furia del huracán Sandy, le extendemos nuestras condolencias, a ellos y a otros en la región.
Señor presidente,
Nosotros seguimos comprometidos con las políticas que protegen el bienestar del pueblo cubano, a pesar del arresto y la detención continuada de Alan Gross, un ciudadano estadounidense de 63 años que fue sentenciado a 15 años de prisión por facilitar acceso a Internet a la pequeña comunidad judía de Cuba. Estados Unidos pide nuevamente a Cuba la liberación inmediata del señor Gross.
Estados Unidos sigue haciendo un llamado al gobierno cubano para que finalmente permita a los ciudadanos cubanos gozar las libertades económicas y políticas internacionalmente reconocidas con las que esta organización está comprometida. La comunidad internacional no puede ignorar en buena conciencia la facilidad y la frecuencia con que el régimen cubano silencia a sus críticos, perturba las reuniones pacíficas e impide ejercer el periodismo independiente. Para septiembre de 2012 la cantidad de detenciones de corta duración, motivadas políticamente, ya habían sobrepasado las casi 4.000 detenciones similares registradas durante todo el año 2011.
Señor presidente,
Esta resolución solamente sirve para distraer la atención de los problemas reales que enfrenta el pueblo cubano, y por lo tanto mi delegación se opondrá a ella. Alentamos a esta organización a que apoye los deseos del pueblo cubano para determinar libremente su propio futuro. Al hacerlo impulsaría verdaderamente los principios de la Carta de las Naciones Unidas y los propósitos para los cuales la Organización de las Naciones Unidas fue creada.