El hospital en Manzanillo continúa bajo estrictos controles de seguridad. La epidemia que tuvo sus primeros brotes en los barrios del Vuelta del Caño y Remate se extendió al barrio el Dagamal. En esa localidad ayer presentaron los mismos síntomas y fueron hospitalizados Ilennia Rosa Benítez del Toro y Misael Jerez. Cuando se reporta un enfermo la ambulancia llega con enfermeros muy protegidos, se llevan al paciente y no permiten que nadie los acompañe.
Se ha prohibido el consumo de carne, pescado, camarones y mariscos. Se ha cerrado el Combinado Cárnico que se encontraba en La Vuelta del Caño y desde donde se distribuían carnes a la zona. También se ha cerrado el Combinado Pesquero de Manzanillo y los pescadores no pueden salir a pescar. Solo los extranjeros o los cubanos que tienen moneda convertible pueden comprar agua y refrescos que no tienen peligro de contaminación. La población tiene que hervir el agua del acueducto y cuidar que las moscas no entren con contacto con los alimentos.
En privado médicos con experiencia en misiones internacionalista han reconocido la epidemia como Cólera. Pero se ha amenazado a los médicos que si dicen que la epidemia es de cólera perderán sus títulos y no podrán ejercer. También en los centros laborales se ha amenazado a los trabajadores con ser penalizados si dicen que es cólera. Incluso se multará a quien en la calle lo mencione. La población no tiene ninguna información y la situación alimentaria es muy difícil. Se rumora que los fallecidos son muchos más que los dos que se han informado en el extranjero.
Escuche a Ubaldo León, delgado del CID en Granma y miembro del Comité Ejecutivo Nacional en entrevistado con Radio Martí
http://cubacid.blogspot.com/ http://patriapuebloylibertad.blogspot.com/