Policías propinan golpes a una Dama de Blanco
Por: Julia Estrella Aramburo Taboas
Melkys Fabré Echevarría, Dama de Blanco y vecina de Monte № 466 e/ Ángeles e Indio, Municipio Habana Vieja, madre de cinco niños menores de edad, nos narra lo sucedido el pasado 27 de Septiembre del 2013.
“Yo me dedico a vender varios artículos de primera necesidad, porque el gobierno por ser Dama de Blanco no me da trabajo, y tengo que vestir, calzar y darle de comer a mis hijos. Por ese motivo me encontraba junto con mi esposo en la Plaza de Armas ubicada en la Habana Vieja a la 1pm, vendiendo, y de pronto me aborda un miembro de la PNR (Policía Nacional Revolucionaria) con número de chapa 04529, y nos dijo: “¿Hasta cuando van a estar vendiendo?”
Inmediatamente llamó a una patrulla, los vendedores de libros -que estaban por ahí cerca- le dijeron que yo tenía cinco niños y tenia que hacerlo para sustentarlos. No le importó, me arrebató de las manos, a mi hija mas pequeña, que todavía no tiene edad escolar, me dio un empujón y una bofetada, para montarme en la patrulla.
Me resistí, pues si no iba con mi hija no me montaba; al ver mi reacción se la dieron a mi esposo para que se la llevara y me condujeron para la Estación de Policía de Dragones que era la más cercana. Camino a la Estación me siguieron dando golpes sin compasión, dos policías con número de chapa 04248 y 03976”. “Me pusieron en el patio de la Unidad, allí empecé a gritar consignas antigubernamentales, y los dos policías que me propinaron los golpes me dijeron que me iban acusar de desacato, y atentado”.
“A las 5:30 pm vino un oficial del Departamento de la Seguridad del Estado para decirle a mi esposo Alcibíades Guerra Marín, que se fuera, para que buscara los demás niños en la escuela, que a mi pronto me iban a soltar”.
“El pronto fue que a las 2:00 am, que se personó el oficial Marcos y otros más, todos de la Seguridad del Estado, para decirme que ya me iban a soltar, con la condición de decomisar los tubos de luz fría que llevaba conmigo, que eran de mi venta. Los cogí todos y los exploté contra el piso, al ver mi reacción este oficial me dijo que me fuera y que cogiera la mochila con todas mis pertenencias, que me habían quedado de la venta”.
La Habana, 8 de octubre de 2013.
Por: Julia Estrella Aramburo Taboas
Melkys Fabré Echevarría, Dama de Blanco y vecina de Monte № 466 e/ Ángeles e Indio, Municipio Habana Vieja, madre de cinco niños menores de edad, nos narra lo sucedido el pasado 27 de Septiembre del 2013.
“Yo me dedico a vender varios artículos de primera necesidad, porque el gobierno por ser Dama de Blanco no me da trabajo, y tengo que vestir, calzar y darle de comer a mis hijos. Por ese motivo me encontraba junto con mi esposo en la Plaza de Armas ubicada en la Habana Vieja a la 1pm, vendiendo, y de pronto me aborda un miembro de la PNR (Policía Nacional Revolucionaria) con número de chapa 04529, y nos dijo: “¿Hasta cuando van a estar vendiendo?”
Inmediatamente llamó a una patrulla, los vendedores de libros -que estaban por ahí cerca- le dijeron que yo tenía cinco niños y tenia que hacerlo para sustentarlos. No le importó, me arrebató de las manos, a mi hija mas pequeña, que todavía no tiene edad escolar, me dio un empujón y una bofetada, para montarme en la patrulla.
Me resistí, pues si no iba con mi hija no me montaba; al ver mi reacción se la dieron a mi esposo para que se la llevara y me condujeron para la Estación de Policía de Dragones que era la más cercana. Camino a la Estación me siguieron dando golpes sin compasión, dos policías con número de chapa 04248 y 03976”. “Me pusieron en el patio de la Unidad, allí empecé a gritar consignas antigubernamentales, y los dos policías que me propinaron los golpes me dijeron que me iban acusar de desacato, y atentado”.
“A las 5:30 pm vino un oficial del Departamento de la Seguridad del Estado para decirle a mi esposo Alcibíades Guerra Marín, que se fuera, para que buscara los demás niños en la escuela, que a mi pronto me iban a soltar”.
“El pronto fue que a las 2:00 am, que se personó el oficial Marcos y otros más, todos de la Seguridad del Estado, para decirme que ya me iban a soltar, con la condición de decomisar los tubos de luz fría que llevaba conmigo, que eran de mi venta. Los cogí todos y los exploté contra el piso, al ver mi reacción este oficial me dijo que me fuera y que cogiera la mochila con todas mis pertenencias, que me habían quedado de la venta”.
La Habana, 8 de octubre de 2013.