Por Leonardo Cancio Santana Ponce
Teléfono 53789060
En Manzanillo, Granma, tres niños resultaron quemados por haber subido a una tonga de paja de arroz la que aún tenía en la parte de abajo fuego. Dos de los muchachos fueron ingresados y se encuentran en esa condición aún -en estos momentos- en el Hospital Celia Sánchez Manduley en esta localidad.
Con el fin de conocer de primera mano, qué ha sucedido con los infantes, entrevistamos al papá de Juan Gabriel Reytor Téllez que resultó el más afectado de los tres.
¿Cuál es su nombre?
Me llamo Manuel Reytor Estrada, soy el padre del niño Juan Gabriel que sufrió quemaduras recientes por la paja de arroz.
¿En dónde residen ustedes?
Somos vecinos de Tomás Barrero # 396 entre Yara y Libertad.
¿Dónde trabaja usted?
No, en estos momentos no tengo un trabajo fijo con el Estado, hago cosas por aquí y por allá, para buscarme unos pesos y dar sustento a mi familia.
¿El día en que sucedió el accidente dónde usted estaba?
Me encontraba tratando de hacer un trabajo particular de construcción.
¿Les ha traído a ustedes como familia alguna consecuencia adicional el accidente del niño?
Sí, por desventura, nos visitó un oficial de Atención a Menores de Bayamo, el municipio cabecera de la provincia, el pasado 9 de febrero, en compañía de la maestra nombrada Rosa Rodríguez de la Escuela Antonio Briones Montoto, sita en la Ave. 1ro de Mayo esquina a Villuenda; allí es donde estudia mi hijo.
¿Y por qué usted dice por desventura?
Porque la visita fue para amenazarme de que podía ser sancionado entre 6 meses y un año de privación de libertad por abandono del niño, después que se realizaran las investigaciones pertinentes.
¿Cuál fue su reacción al respecto?
Bueno pues le respondí en primer lugar que yo nunca he abandonado a mi hijo, y que aquí en el municipio otros niños han pasado por el mismo problema, que el único responsable es el director de la Empresa del Molino Arrocero, ya que no tiene allí señalizado el peligro que esto representa y tampoco tienen un custodio que no permita que las personas se acerquen. Además habría que añadir también, como han estado divulgando por la radio y el canal de televisión local que el medio ambiente en Manzanillo está contaminado y que hay muchas personas afectadas con problemas respiratorios y catarro.
¿Por qué usted piensa que le hicieron esta amenaza?
Yo creo que porque contacté con la gente de los Derechos Humanos y ahora quieren castigarme por eso, porque parece que la noticia salió en un sitio que lee mucha gente en internet, bueno yo no tengo idea ni de lo que es eso.
¿Cómo va evolucionando la salud del niño en estos momentos?
A mi hijo lo han llevado dos veces al Salón de Operaciones en lo que va de mes, pero no le han podido efectuar un injerto de piel que necesita en la planta de los pies, porque la situación que tiene con sus quemaduras aún no se lo permite.
Después de dar las gracias a este padre que además de tener a su hijo ingresado lleva el peso de la amenaza de prisión, nos despedimos de él y nos dijo muy humildemente:
“Gracias a ustedes por preocuparse y a los que sacaron la noticia”.
Manzanillo, 19 de febrero de 2015.
Teléfono 53789060
Con el fin de conocer de primera mano, qué ha sucedido con los infantes, entrevistamos al papá de Juan Gabriel Reytor Téllez que resultó el más afectado de los tres.
¿Cuál es su nombre?
Me llamo Manuel Reytor Estrada, soy el padre del niño Juan Gabriel que sufrió quemaduras recientes por la paja de arroz.
¿En dónde residen ustedes?
Somos vecinos de Tomás Barrero # 396 entre Yara y Libertad.
¿Dónde trabaja usted?
No, en estos momentos no tengo un trabajo fijo con el Estado, hago cosas por aquí y por allá, para buscarme unos pesos y dar sustento a mi familia.
¿El día en que sucedió el accidente dónde usted estaba?
Me encontraba tratando de hacer un trabajo particular de construcción.
¿Les ha traído a ustedes como familia alguna consecuencia adicional el accidente del niño?
Sí, por desventura, nos visitó un oficial de Atención a Menores de Bayamo, el municipio cabecera de la provincia, el pasado 9 de febrero, en compañía de la maestra nombrada Rosa Rodríguez de la Escuela Antonio Briones Montoto, sita en la Ave. 1ro de Mayo esquina a Villuenda; allí es donde estudia mi hijo.
¿Y por qué usted dice por desventura?
Porque la visita fue para amenazarme de que podía ser sancionado entre 6 meses y un año de privación de libertad por abandono del niño, después que se realizaran las investigaciones pertinentes.
¿Cuál fue su reacción al respecto?
Bueno pues le respondí en primer lugar que yo nunca he abandonado a mi hijo, y que aquí en el municipio otros niños han pasado por el mismo problema, que el único responsable es el director de la Empresa del Molino Arrocero, ya que no tiene allí señalizado el peligro que esto representa y tampoco tienen un custodio que no permita que las personas se acerquen. Además habría que añadir también, como han estado divulgando por la radio y el canal de televisión local que el medio ambiente en Manzanillo está contaminado y que hay muchas personas afectadas con problemas respiratorios y catarro.
¿Por qué usted piensa que le hicieron esta amenaza?
Yo creo que porque contacté con la gente de los Derechos Humanos y ahora quieren castigarme por eso, porque parece que la noticia salió en un sitio que lee mucha gente en internet, bueno yo no tengo idea ni de lo que es eso.
¿Cómo va evolucionando la salud del niño en estos momentos?
A mi hijo lo han llevado dos veces al Salón de Operaciones en lo que va de mes, pero no le han podido efectuar un injerto de piel que necesita en la planta de los pies, porque la situación que tiene con sus quemaduras aún no se lo permite.
Después de dar las gracias a este padre que además de tener a su hijo ingresado lleva el peso de la amenaza de prisión, nos despedimos de él y nos dijo muy humildemente:
“Gracias a ustedes por preocuparse y a los que sacaron la noticia”.
Manzanillo, 19 de febrero de 2015.