twiteros cubanos libres

Mostrando entradas con la etiqueta La Habana. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta La Habana. Mostrar todas las entradas

sábado, 7 de diciembre de 2024

Sandro Castro, Hicimos la fiesta, ¿y qué?

Sandro Castro, que no es un joven humilde, pero al menos da la cara, ha demostrado ser un revolucionario de pura cepa.

  Hicimos la fiesta, ¿y qué?

LA HABANA, Cuba – Sandrito lo hizo otra vez y a lo grande, como prometió. Eso le honra: es el único Castro que cumple sus promesas, así que no hay nada que reprocharle, al menos en ese sentido. Si miramos las cosas fríamente, hay que convenir en que el nieto del tirano no le ha faltado el respeto a nadie, en primer lugar, porque es imposible irrespetar a un pueblo que no se respeta a sí mismo. ¿Qué ha sido un cínico? Cierto. ¿Que no le importa que Cuba se esté cayendo a pedazos mientras él celebra por todo lo alto? Estamos de acuerdo. Pero es que hay que reconocer que motivos le sobran para celebrar, y no solo su cumpleaños.

Así, por arribita, y aprovechando que en redes sociales circula el discurso con el cual Fidel Castro justificó la Ofensiva Revolucionaria de 1968, Sandro Castro tiene que celebrar que cuando él ni siquiera pensaba nacer, su abuelo fue cerrando, uno por uno, todos los negocios, grandes o pequeños, y con cada empresa expropiada aumentaba su peculio particular, para sí mismo y sus descendientes. Fidel Castro, además de encaramársele en las narices al entonces gobierno de los Estados Unidos, había robado un país para ponerlo en manos de su familia, entre los aplausos y vivas de millones de atolondrados que, de la noche a la mañana, se tragaron la acusación de que el barbero de toda la vida, el dueño de la bodeguita de la esquina y el carnicero que les pesaba las libras de falda, “eran vagos, o medio vagos, o vagos y medio” por el simple hecho de tener su propio negocio. Sandro Castro tiene que brindar porque el reciente decreto que prohíbe a las mipymes el comercio mayorista no lo va a tocar a él, ni a su bar EFE, ni a cualquier otro negocio que mantenga oculto, aunque el muchacho ya ha demostrado que no es de los que se esconde. Él, que no es un joven humilde, pero al menos da la cara, ha demostrado ser un revolucionario de pura cepa. 

Sandro Castro es, a careta quitada, lo que ha sido siempre la Revolución por debajo del tapete. La coquetería rencorosa del agente Pedro Jorge Velázquez (alias El Necio), diciendo que “a Sandro hay que despreciarlo”, para después bajarle el tono al ataque y desviar la atención a “los burgueses de Miami”, es un manoteo de niña de primaria contra un monstruo que él sabe lo puede sacar de circulación y devolverlo, en un pestañazo, a la cloaca de donde lo sacaron para ser el abanderado de la juventud comunista progre, guevarista, LGBTI, defensora del regreso a los orígenes de la verdadera izquierda. 

Contra Sandro Castro, lo que representa y lo que proyecta, van a estrellarse todos los discursillos que tiren de puridades ideológicas y culto a la memoria de los muertos. Al Necio lo sigue un puñado de cerebritos desnutridos que no tienen nada que ofrecer, mientras Sandro Castro es un empresario joven con poder, plata, impunidad, ganas de divertirse y ciudadano ejemplar de la República Repartera. Esa masa joven a la que Díaz-Canel quiere llegar utilizando la música urbana como arma ideológica, prefiere cien Sandro Castro antes que un solo Necio. 

Si nos ponemos conspiranoicos, habría que ver hasta qué punto la “papa podrida” se está empeñando realmente en corromper el costal completo, o si él mismo se ha echado al hombro la tarea de poner al inútil, semianalfabeto, superficial y narcotizado hombre nuevo al servicio del no tan nuevo orden que se está recomponiendo allá arriba, mientras espera con impaciencia la muerte de Raúl Castro. Nadie duda ya de que en las alturas hay una guerra, abierta o sibilina, por el poder, y cada facción intenta mostrar músculo. El hijastro de Díaz-Canel, que carece de pedigrí, muestra su glamorosa ofensiva (Ana de Armas) y se sienta a la mesa, en un restaurante súper exclusivo, con gente que sabe tirar la piedra y esconder la mano. 

 Y se hizo la fiesta: luz en el EFE Bar, penumbra en Cuba 

Sandro Castro no necesita esforzarse tanto, aunque quizás le moleste que su novia sea más bien una chica anodina en comparación con la cocotte de la raspadura. No importa, en cualquier caso, porque él sí tiene sangre real y puede permitirse la ostentación en casa, en la cara de la plebe que pidió a gritos, hace sesenta años, que todos fuéramos igualmente pobres. Aquí dentro, donde debería decidirse el futuro de este país, hicieron la fiesta, ¿y qué? El país se derrumba y ellos celebrando, ¿y qué?

Desde hace mucho, todos ellos hacen lo que les viene en gana y en cualquier momento, si les place, lo van a subir a las redes sociales para que nos revolquemos de asco y vergüenza frente a las pantallas de nuestros móviles, porque está probada la incapacidad de este pueblo de indignarse. Después de sesenta años de experimento social, de habernos convertido en un rebaño inmunodeprimido por el hambre y los vicios, dominado por el Químico y similares, embrutecido por la doctrina y la pésima calidad del sistema educacional cubano, desesperado por huir y dejarles el país, la fase final consiste en torturarnos por puro sadismo. Ya nada nos pueden quitar, y quien diga que aún nos queda la vida, que mire a su alrededor y se pregunte si a esto realmente puede llamársele vida. 

Tomado de:  Cubanet Noticias sobre Cuba https://s3.eu-central-1.amazonaws.com/qurium/cubanet.org/hicimos-la-fiesta-y-que.html

martes, 4 de octubre de 2022

domingo, 2 de octubre de 2022

domingo, 12 de junio de 2022

jueves, 7 de abril de 2022

"Cuba" Las fábulas de Díaz Canel, Gil y Marrero.

 

 

NoticiasCubanet Cuba

Las fábulas de Díaz Canel, Gil y Marrero. Los mandamaeses cubanos justifican la inoperancia del sistema.

lunes, 19 de julio de 2021

"Cuba" “¡Asesino!”: responden a Díaz-Canel por celebrar “Día de los niños” "¡Ayúdenme, yo soy menor de edad!"

Entre 495 personas detenidas y desaparecidas en Cuba durante las protestas duramente reprimidas por el régimen, hay al menos 7 menores de edad

 


El presidente del régimen castrista, Miguel Díaz-Canel, fue calificado de “asesino” y “mentiroso” en respuestas a un tuit con el que celebró el “Día de los niños” este domingo 18 de julio.

En medio de la mayor ola represiva de las últimas décadas, tras el levantamiento popular del 11 de julio, el mandatario designado por el general Raúl Castro pretendió darse una cara amable. Sin embargo, como le ocurre desde que los cubanos usan las redes sociales para expresarse abiertamente contra el régimen, los resultados para Díaz-Canel fueron nefastos.

“A nuestros niños, los que saben querer y tantas lecciones de valentía nos han dado en este difícil tiempo de pandemia, ¡muchas felicidades!”, expresó el presidente en Twitter.

Además, junto con una imagen que mostraba al personaje animado Elpidio Valdés y a un menor, el dictador añadió: “En Cuba, al Día del niño, también ponle corazón”.

Semejantes declaraciones no cayeron bien, en días en que las familias pernoctan fuera de estaciones policiales buscando a sus hijas e hijas secuestrados en las manifestaciones.

“Hay niños presos hoy en Cuba solo por pensar diferente, están presos por su culpa”, le respondió el escritor Ariel Maceo.

La artista y activista Salomé García, emplazó al dirigente castrista por arrestar y disparar a menores de edad en las protestas: “¡Asesino! ¡¡Libera a todos los niños que tienes detenidos por protestar contra tu gobierno!! Glenda de la Caridad solo tiene 15 años!!


La organización de derechos humanos Cubalex, que ofrece asesoría legal a activistas en Cuba, suma en un listado 495 personas detenidas y desaparecidas durante las protestas duramente reprimidas por el régimen, entre ellas al menos 7 menores de edad.

En un video publicado por ADN Cuba, se observa la detención violenta de una persona muy joven que la comunidad asegura que es “menor de edad”. Al menos seis sujetos, entre uniformados y agentes de la policía política vestidos de civil, golpean a un adolescente presuntamente por filmar la represión.

A empujones y llaves de control por el cuello, los represores tratan de inmovilizarlo y meterlo dentro de una patrulla, mientras el chico pide ayuda: “¡Ayúdenme, yo soy menor de edad!”

Su ruego es respaldado por muchos testigos que la emprenden a gritos contra los agentes: “¡Eso es un abuso!”.

También la médico Janet Jalil replicó insultada la felicitación del presidente: “Nuestros niños quieren Libertad y futuro y que no los repriman por pedirlo, ni a ellos ni a sus padres y abuelos. Nunca he visto mentir tanto como lo hacen los comunistas a la cara”.

También le señalaron que a la “guerra civil en Cuba financiada por el Estado”, como le dicen a la represión desatada este mes, “enviaron a pelear contra el pueblo a los jóvenes del Servicio Militar Obligatorio y los chantajea con el Delito de Traición a la Patria si no cumplen las órdenes”. Muchos de esos jóvenes soldados son menores de edad, pues no rebasan los 17 años.

El usuario identificado como @FClarias añadió en otro tuit: “Estos son los niños cubanos, sin sueños, sin futuro, sin inocencia, sólo pensando en resolver un problema económico antes de jugar. Cuba, un país sin juguetes, confituras ni leche”.

La emprendedora Saily González Velázquez dejó claro a Díaz-Canel: “yo no olvido la masacre”, de los últimos días, instigada en televisión nacional por el propio mandatario.

Por su parte, @Libertad12021 cuestionó: “¿Qué felicidad hay para un niño cuando los padres no tienen recursos para comprarle caramelos en una tienda MLC? No hay medicina para la sarna o en tratamientos para los niños. ¿Y los niños de la familia [opositora] Miranda-Leyva? Están matando a los niños y al pueblo Cubano”.

La represión castrista no distingue entre adultos o niños. Desde el barrio marginado La Güinera, en el municipio Arrollo Naranjo (La Habana), fuentes médicas declararon a la periodista periodista Darcy Borrero que hubo varios heridos por la arremetida policial del 12 de julio, entre ellos un menor de 13 años impactado por una bala que “no se ha confirmado si metálica o de goma”, quien sobrevivió.

Tomado de: https://adncuba.com/noticias-de-cuba/derechos-humanos/asesino-le-dicen-canel-por-reprimir-ninos


viernes, 19 de marzo de 2021

"Cuba" Tras denuncias en las redes sociales, el Gobierno de Cuba reconoce problemas en los centros de aislamiento por Covid-19

Una bandeja de comida en un centro de aislamiento en La Habana.
Una bandeja de comida en un centro de aislamiento en La Habana. Johan Pérez/Facebook

 'Hay que atenderlos con los recursos limitados que tenemos', dice Manuel Marrero.

La Habana

El Gobierno de Cuba reconoció este jueves problemas en los centros de aislamiento por Covid-19 tras "las múltiples denuncias en Granma, Pinar del Río, Mayabeque, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Guantánamo e Isla de la Juventud", informó la televisión cubana

"Hay que atenderlos con los recursos limitados que tenemos, pero con un derroche de cariño, de buen servicio, de buen trato... Nos faltarán mucho recursos, pero tenemos que ver mucha higiene, mucha limpieza. Eso no puede faltar en esos lugares", dijo el primer ministro, Manuel Marrero

Los problemas en los centros de aislamiento no fueron detallados ni en la televisión, ni en el periódico oficial Granma

Sin embargo, en las redes sociales son varias las denuncias por la mala alimentación, la falta de higiene y de condiciones mínimas como una mesa o silla para comer. 

El médico cubano Johan Pérez denunció esta semana la comida en el centro de aislamiento en el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas (IPVCE) Vladimir Ilich Lenin en La Habana.   

"Y aquí tienen el delicioso manjar que se les está ofreciendo a los pacientes de Covid-19 en el centro de aislamiento de La Lenin. Ahora quiero que aparezca alguien a intentar desmentir el post. Imagino que los dirigentes y sus familiares estén comiendo lo mismo", dijo Pérez en Facebook con una foto de una bandeja de comida con una mosca incluida. 

Por su parte, Pedro Quiala denunció "la atención prestada a los pacientes con sospecha de Covid-19 en la residencia La Primavera, en el municipio de San Miguel del Padrón. No tienen mesa para comer ni donde poner la bandeja después de comer, no hay closet para poner sus pertenencias y muchos jóvenes y adultos están plantados por el mal trato médico y sanitario del lugar".

"Horrible esto, esto es una 'cochiná'. Esto es un albergue. No te puedo explicar la 'cochiná' que hay. Aquí vamos a salir peor (...) No sé cómo es posible que pueda uno tener acceso a un baño de esta manera... unas personas que somos asmáticas", denunció una cubana en un video grabado en un centro de Artemisa. En las imágenes se ve la suciedad en el sitio.

Una persona con Covid-19 denunció bajo anonimato a DIARIO DE CUBA el trato pésimo que recibió en un centro de aislamiento en Matanzas. La persona dijo "que la está pasando negra y ojalá sus amigas nunca caigan en ese sitio". En el local "no hay ni mesas para sentarse a comer", agregó.

El centro denunciado está ubicado en los albergues del petróleo en Santa Marta, entre Cárdenas y Varadero.

Tomado de: https://diariodecuba.com/cuba/1616150658_29693.html

martes, 29 de diciembre de 2020

"Cuba" Sociedad Panameña de Cardiología rechaza contratación de brigada médica cubana

La Sociedad Panameña de Cardiología envió a las autoridades de su país una carta abierta en la que afirma que la contratación de médicos cubanos para combatir la COVID-19 vulnera las leyes vigentes

 

Por Yolanda Huerga

La Sociedad Panameña de Cardiología (SPC) envió a las autoridades de su país una carta abierta en la que afirma que la contratación de médicos cubanos para combatir la COVID-19 vulnera las leyes vigentes en cuanto a la contratación de personal de Salud en el exterior.

Radio Televisión Martí entrevistó a uno de los firmantes de la misiva, el presidente electo de la SPC, el doctor Temístocles Díaz Lezcano, cardiólogo intervencionista, especialista en medicina interna y en trasplante cardiaco.

“La llegada de los médicos cubanos ha llevado consigo a que la Sociedad Panameña de Cardiología emita un comunicado en relación a la violación que se ha hecho a los acuerdos establecidos en agosto 2020, precisamente, [con la intención] de prepararnos para la llegada de médicos extranjeros durante esta etapa de la pandemia”.

En su mensaje, los peritos en enfermedades del corazón alegan que la ley prevé que las contrataciones de médicos de otras naciones deben ser individualizadas y no en grupo como ha sido en el caso de los cubanos.

De tal forma se determina el salario que se le paga a cada uno de ellos, declaró el cardiocirujano y agregó: “Nada de esto se ha hecho, razón por la cual aquí hay uno de los visos de violación” de la normativa de agosto del 2020.

Díaz Lezcano señaló que “Panamá es un crisol de raza y siempre estamos abiertos a todos los médicos del mundo que nos puedan ayudar. Sin embargo, como es bien sabido, cada Estado tiene sus diferentes regulaciones para aceptar especialistas en medicina. Aquí se habían pautado las reglas, por decir así, para hacer esta aceptación. Una de ellas tenía que ver con la homologación de los títulos”.

Asimismo, la ley número 89 del primero de noviembre de 2013 indica que los contratados deben cumplir una serie de requisitos entre los que está la realización de una nota de aprobación de “un examen teórico-práctico de cada área de experticia acreditada”.

La Sociedad Panameña de Cardiología solicita conocer los términos económicos del pacto con el régimen de La Habana, ya que ha trascendido que se pagarán 591 mil 197 dólares, pero no cuánto percibirá cada médico, aunque calculan que está alrededor de los 2687 dólares, más de lo que cobra el personal nacional.

Respecto a lo anterior, Díaz Lezcano aseguró “que ningún médico panameño que inicia a trabajar gana este salario hoy día”.

“Pero lo que más nos ha llamado la atención es que estos emolumentos [salarios] son pagados al gobierno cubano no a los médicos individualmente”.

anamá tendrá que desembolsar más de medio millón de dólares cada mes, para un grupo formado por unos 230 profesionales. “Exigimos que tiene que haber una información completa de los fondos públicos utilizados para este contrato y que esto se lleve a cabo de la manera más transparente”, recalcó Díaz Lezcano.

“Así como a nosotros se nos exige una serie de revisiones cada vez que nos movemos a cualquier país para practicar la medicina, de igual forma nosotros damos ese trato de reciprocidad”, puntualizó.

Según el experto, los convenios de agosto de 2020 no se cumplieron, por lo que la Sociedad Panameña de Cardiología no acepta la presencia de médicos proveniente de Cuba o de cualquier otro lugar que no pase por los parámetros instituidos para practicar la medicina en territorio panameño.

La carta de la asociación panameña lamenta que la institución no fuera consultada sobre la necesidad de contratar a cardiólogos foráneos y que no han podido evaluar su preparación académica.

Igualmente, los médicos panameños denuncian lo que consideran falta de planificación por parte de su Gobierno de la situación sanitaria durante la pandemia y apuntan que su campo, que supone el cuidado de los trastornos cardiovasculares, una de las primeras causas de muerte en la nación, está desatendido, lo que implica un incremento de la mortalidad por este concepto.

El pasado jueves, el decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá, el doctor Enrique Mendoza, renunció al Consejo Consultivo de Salud porque la contratación de la brigada cubana para la lucha contra el coronavirus “viola las leyes de la República”.

Por su parte, el sábado, en conferencia de prensa, Sharomay Osma, jefa médica del Centro de Convenciones Figali, habilitado para atender pacientes de la COVID-19, afirmó que los del equipo de la Isla “deberán acatar” los protocolos desarrollados en Panamá para el tratamiento a los infectados.

Consulte la carta de la Sociedad Panameña de Cardiología en este enlace.

 

(Tomado de Radio Televisión Martí)

 

Retomado de: https://adncuba.com/noticias-de-cuba/actualidad/sociedad-panamena-de-cardiologia-rechaza-contratacion-de-brigada-medica

 

 

 

 

martes, 13 de octubre de 2020

"Cuba" El pelotero de las Grandes Ligas Antonio Rivas le escribio esto a Maduro:

 

La imagen puede contener: 1 persona, sonriendo, primer plano

 

Jose Antonio Cisneros

Me llamarán dictador, no me importa”. 

Con esta frase arreciaba el presidente Maduro su discurso inflamable contra la prensa escrita de Venezuela. Yo quisiera tomarme la libertad de darle al presidente mi opinión personal: yo no creo que sea usted un dictador.
 
Si usted fuera un dictador tendría a todas las empresas expropiadas produciendo por encima de lo que producían cuando las expropiaron. 
 
Sus gerentes estarían temblando por entregarle a usted resultados extraordinarios y se pelearían por ganarse su beneplácito. 
 
Nadie se atrevería a revender cabillas, cemento y demás productos regulados. 
 
Tendría usted las cadenas de suministro de alimentos, puertos, almacenes, y supermercados del Estado operando a su máxima capacidad. 
 
Si usted fuera dictador no habría secuestros ni se cobrara vacunas a comerciantes y ganaderos en nuestro territorio, no habría delincuencia, no estaría el hampa reinando impunemente en ciudades, carreteras y pueblos. 
 
Los delincuentes le temieran a las fuerzas del orden público. 
 
Si usted fuera dictador, nadie osaría botar basura en la calle, o a rayar las paredes, o siquiera a pasarse una luz roja. Pero todo eso ocurre en Venezuela, y más.
 
A mi juicio, usted simplemente ha demostrado carecer de las competencias pertinentes para ser Presidente de la República, y viéndose abrumado por la anarquía que le dejó su predecesor solo puede jugar a ser poderoso con lo poco de institucional que queda en el país, mientras pasa el tiempo y no se resuelve nada. 
 
Usted tiene la actitud del niño de escuela que, sabiéndose reprobado en todo, opta por descargar su ira con los más pequeños, para intentar ganar a golpes el respeto que nadie le tiene, pero eso no es dictadura, es bullying.
 
Yo más bien considero que en este momento usted es el mayor preso político que ha tenido nuestra historia. Enjaulado en un proceso político que lo tiene rodeado de espinas en todas direcciones, excepto una: La Habana, donde se encuentra un dictador de verdad. 
 
Usted está obligado a manejar este caos tomando decisiones avaladas (o impuestas) por los hermanos Castro, que no contradigan a Chávez, y que no molesten a Cabello y a Ramírez. Usted está tan acorralado que no puede ni siquiera devaluar con libertad, con valentía, sino que tiene que ocultarlo, disfrazarlo, y hasta negarlo. 
 
Usted debe darle ascenso a militares golpistas para mantenerlos contentos. Usted se ve obligado a inventar guerras imperialistas para poder excusar la falta de resultados. Usted no persigue a la prensa para amedrentar a la disidencia, sino para callar las estadísticas de delincuencia, escasez, corrupción, inflación, y el creciente descontento en la población. 
 
Usted tiene una Ley Habilitante todo poderosa, y no ha podido habilitar nada. Usted no ha podido ni siquiera mudarse a La Casona como le corresponde. Usted no está en control. Entonces ¿dónde está el dictador?
 
Lea “La fiesta del Chivo” de Vargas Llosa, para que se dé cuenta de que usted tiene mucho de Balaguer y nada de Trujillo. Investigue un poco y dígame quién se imaginaría a los presos mandando en las cárceles en el Chile de Pinochet, o bandas de “orejones” intimidando poblados en la España de Franco. Imagine usted grupos de motorizados atracando en las autopistas en la época de Pérez Jiménez. Es sencillamente impensable.
 
En resumen, Maduro, anarquía e ineptitud no es dictadura, sino solo eso, anarquía e ineptitud. Y soberbia, amenazas y evasión de responsabilidad no hace dictadores.
 
Despójese de las ataduras políticas, asuma su responsabilidad, reconozca que la mitad del país no quiere comunismo, exíjale resultados a sus ministros y gerentes o sustitúyalos, ponga en cintura a los delincuentes, llene los anaqueles de producción nacional, encarcele a sus corruptos y controle la inflación, solo entonces tendrá el honor de afirmar dignamente que le tiene sin cuidado como le llamen.
Mientras tanto, cualquier título le quedará grande, incluso el de dictador.
 
Tomado de: Facebook 

domingo, 27 de septiembre de 2020

"Cuba" EL H.P. HOMBRE DE MAISINICÚ. Fue encontrado colgado en un árbol.

 

La imagen puede contener: 2 personas, sombrero  

Esteban Fernandez

EL H.P. HOMBRE DE MAISINICÚ

 Por Esteban Fernández Voy a seguir haciendo un esfuerzo por decirles las verdades que les han ocultado a las nuevas generaciones de cubanos.

 La tiranía le ha presentado al pueblo cubano una venenosa serpiente cascabel como un héroe y un mártir. Una hiena uniformada de verde olivo.

Escribí sobre La Niña del Escambray, hoy hablaré sobre el gran causante de su tragedia: El tristemente famoso HOMBRE DE MAISINICÚ. Hasta le hicieron una película (EN LA FOTO) y el descarado y oportunista Silvio Rodríguez le dedicó una canción. 

Lo cierto es que el peor de los infiltrados fue este Alberto Delgado Delgado “El Hombre de Maisinicú”. 

FÍJENSE SI ESTE TIPO ERA MALO QUE COMENZÓ SUS ACTIVIDADES DE CHIVATÓN DENUNCIANDO A SU FAMILIA: En 1961 va para La Habana, y se relaciona con algunos parientes de marcada postura contrarrevolucionaria y rapidamente los echó pa'lante y ahí mismo establece contactos con el MINISTERIO DEL INTERIOR, y comienza su labor disfrazado como enemigo del régimen. 

Según mi buen amigo Enrique Encinosa: El balance siniestro de la misión de este desmadrado infiltrado castrista fue el siguiente: Más de treinta guerrilleros fueron llevados a juicio en La Habana. 

Dieciocho hombres -entre ellos Amador Acosta, y una gloriosa mujer, Zoila Águila Almeida (La Niña de Placetas)- fueron sentenciados a largas condenas carcelarias, doce hombres incluyendo a los Comandantes Maro Borges y Julio Emilio Carretero, fueron condenados a morir fusilados... 

Alberto Delgado, más conocido como “El Hombre de Maisinicú” se infiltró en las filas de los gloriosos alzados del Escambray. Y el hueco que les hizo fue de dimensiones garrafales. 

El genocidio, producto de la intervención de este siniestro sujeto, formó un río de SANGRE patriótica de por lo menos cinco kilómetros de largo. 

Esa era una época donde ni Tomasito San Gil, ni Porfirio Ramírez, ni Plinio Prieto, ni cientos de combatientes de El Escambray podían hablar con las estaciones de radio de Miami criticando al desmadrado “Hombre de Maisinicú”, y muchísimo menos pidiendo dinero. Y fueron a parar a una fosa común asesinados por el Comandante Félix Torres en “La Campana” … 

Quede claro que debemos enaltecer a la valiente Zoila Águila- como todos ustedes hicieron ayer- pero también queda PROHIBIDO OLVIDAR olvidar a los grandes culpables, a los que ensangrentaron a la Patria desde La Punta de Maisí hasta el Cabo de San Antonio. 

Pero no se atormenten: “El hombre de Maisinicú” fue encontrado colgado en un árbol.

Con el permiso del autor:  Esteban Fernandez 

Y poblicado en Facebook por Puchy Alvarez

jueves, 20 de agosto de 2020

"Cuba" Ni Cuba era colonia de Estados Unidos ni los desposeídos arribaron al poder en enero de 1959

   
Desmontemos dos viejos mitos del castrismo

fidel castro raúl socialismo revolución cubana cuba régimen dictador
                                                           Raúl y Fidel Castro, 1977 (foto: UPI) 

LA HABANA, Cuba. – Como parte de su campaña permanente por demeritar la imagen de la República y exaltar la revolución de Fidel Castro, la propaganda oficialista acude con frecuencia, entre otras armas de su arsenal, a dos viejos mitos. Así lo hemos constatado una vez más en un reciente artículo aparecido en el periódico Granma titulado “República neocolonial, Revolución y posposiciones”.
Nos referimos a la supuesta condición de colonia o neocolonia de Estados Unidos que exhibía la Cuba republicana, y el advenimiento al poder de los humildes y desposeídos a partir del 1ro de enero de 1959.
Con respecto al primero de esos mitos, no hay más que repasar el curso del pasado siglo XX para comprobar cómo actuaban realmente las metrópolis en relación con sus colonias. Las metrópolis no permitían bajo ningún concepto que en sus colonias sucedieran cambios de régimen que afectasen el estatus colonial.
El mejor ejemplo de lo anterior lo observamos en el accionar de la Unión Soviética con las naciones de Europa oriental que construían el denominado “socialismo real”. En primer término la entrada de los tanques soviéticos en Hungría en 1956 con el propósito de impedir la toma del poder de elementos reformistas que pretendían sacudir el yugo impuesto por el Kremlin,
Menos de un decenio después, la fatídica Doctrina Brezhnev se ponía de manifiesto cuando las tropas soviéticas penetraron en Checoslovaquia para poner fin a la denominada Primavera de Praga. Esas sí eran colonias de verdad. Y, a propósito, Fidel Castro apoyó en su momento la última de esas intervenciones militares
Lo que sucedió en torno a Cuba, en cambio, transcurrió de una manera muy diferente. Casi desde el arribo de Castro al poder fue evidente que su régimen sería un adversario permanente de Estados Unidos. Sin embargo, Washington no implementó ninguna acción directa, con sus marines, para desalojar del gobierno a Castro y sus seguidores. Ya eran otros tiempos. La Enmienda Platt había sido derogada en 1934 en el contexto de la Política del Buen Vecino llevada a cabo por el presidente Franklin Delano Roosevelt. Evidentemente, Cuba no era una colonia de Estados Unidos en ese momento.
Por otra parte, es poco menos que risible esa recurrente afirmación de que el pueblo cubano llegó al poder junto con los barbudos de la Sierra Maestra. No existe ningún ejemplo de gobierno comunista de partido único donde la clase obrera haya ejercido realmente el mandato de su nación.
Incluso, los propios medios académicos reconocen tal realidad. En el libro De Petrogrado al socialismo en Cuba, cien años después (Editorial José Martí, 2018), de reciente circulación en la isla, el académico castrista Orlando Cruz Capote, al referirse al partido de los bolcheviques en el poder, escribió que “Un Partido Comunista de nuevo tipo, concebido por Lenin, que de un rejuego retorcido y burócrata dio lugar, erróneamente, a una dictadura de las élites del partido y estatales bajo la concepción estalinista, no representando a la mayoría de los explotados y oprimidos”. (Pag 31)
Por supuesto que ese académico circunscribe semejante anomalía a lo sucedido en la antigua Unión Soviética. Él no desea, o no puede, aseverar que eso mismo es lo que ocurre en Cuba. Porque aquí la cacareada dictadura del proletariado, dio paso a la dictadura del Partido Comunista, y esta en realidad a la de la cúpula del partido.
Cómo si no se podría explicar la permanencia por seis décadas en la nomenclatura partidista y gubernamental de Raúl Castro, Machadito Ventura, Ramiro Valdés, y otras figuras de menor relieve. Y por supuesto que ellos no se manifiestan como parte de los desposeídos en el poder. Viven como auténticos reyes.

ACERCA DEL AUTOR

Orlando Freire Santana

Orlando Freire Santana

Orlando Freire. Matanzas, 1959. Licenciado en Economía. Ha publicado el libro de ensayos La evidencia de nuestro tiempo, Premio Vitral 2005, y la novela La sangre de la libertad, Premio Novelas de Gaveta Franz Kafka, 2008. También ganó los premios de Ensayo y Cuento de la revista El Disidente Universal, y el Premio de Ensayo de la revista Palabra Nueva.


 


miércoles, 15 de julio de 2020

"Cuba" Black Lives Matter y la Inteligencia castrista


Ec0TdhcUMAA3Oev
El ensayo general pudo haber sido en Chile, y les funcionó muy bien.

El Castro-Narco-Chavismo, herido por la sublevación de los jóvenes venezolanos contra el títere Maduro, decidió demostrarle al mundo que eso de las protestas juveniles es un fenómeno universal, y que ellos pueden desencadenarlas cada vez que les dé la gana.

Para demostrarlo, los agentes de La Habana en Santiago decidieron, después de más de veinte años de gobiernos pro-castristas en Chile, que el incremento del precio del Metro era una afrenta insalvable a la dignidad humana, y una prueba infalible de la existencia de una desigualdad sistémica que fue ignorada, con disciplina marxista, durante más de dos décadas de gobiernos chilenos de izquierda.

Ese absurdo ideológico permitió darles la orden a las tropas de choque del Castro-Narco-Chavismo para que salieran a las calles de Chile a catalizar la radicalización, una palabreja que a ellos les encanta, de esa fracción de los jóvenes chilenos (hay gente para todo) que estuvieran dispuestos a quemar, destruir, mentir, amenazar y crear el caos.

Las características esenciales de esas protestas fueron:
  1. Organizadores con antecedentes marxistas y pro-castristas.
  2. Ningún llamado previo, por parte de los “organizadores”, a la no violencia y a la identificación de la violencia como una acción de elementos provocadores.
  3. Apoyo tácito o evidente de la oposición política.
  4. Restricción parlamentaria de la capacidad de respuesta del gobierno.
  5. Restricción mediática, a partir de los medios de izquierda, de la capacidad de respuesta del gobierno.
  6. Destrucción de la propiedad pública, de la pequeña propiedad privada, de los símbolos nacionales, de las iglesias y los símbolos religiosos.
  7. Demonización de las fuerzas del orden público y de la legalidad.
  8. Llamados a la parálisis legal mediante el reto constitucional.
  9. Llamados constantes, mediante hechos, palabras y provocaciones, a la guerra civil.
  10. Presencia de agitadores y/o financiadores extranjeros.
Les salió tan bien la jugada a los Castro-Narco-Chavistas, y están tan aterrados con la eventual reelección de Donald Trump, que parece que decidieron entrar en colusión con la élite del Partido Demócrata en los Estados Unidos (que también anda aterrada con el fantasma de esa reelección) para usar la misma táctica en ese país.

Aquí se impone recordar que las ideologías son los sistemas de colusión política más viejos que se conocen. Dos personas o grupos que comparten una ideología siempre están –a través de los mandamientos de esa ideología– en constante colusión.

Un marxista estadounidense no necesita, digamos, recibir la orden precisa de un castrista para saber qué es lo que tiene que hacer ante una situación determinada, sobre todo si se trata de una protesta.
Igual, un odiador estadounidense de los Estados Unidos (que los hay) no necesita ponerse de acuerdo, o recibir una orden, de un odiador de los Estados Unidos que viva en el Medio Oriente, en Somalia, o en La Habana. El simple hecho de compartir odios los aúna en la lucha contra el objeto de sus animadversiones.

Lo que quiero decir con esto es que, a pesar de las múltiples visitas de la élite del Partido Demócrata a La Habana, y de nuestra incapacidad para demostrar de qué hablaron, no es imposible imaginar que exista cierto nivel de colusión. Al final, los odios y las inclinaciones marxistas siempre han estado ahí y con eso, nos enseña la Historia, es más que suficiente.

Quizás sea por eso que cuando analizamos las protestas en los Estados Unidos vemos que son una reproducción casi exacta de lo sucedido en Chile.

El origen de las protestas gringas bien pudo haber sido el Metro, pero fue la triste y vergonzosa muerte de un delincuente negro en manos de un policía que, a todas luces, hizo un uso excesivo y criminal de la fuerza durante una detención.

A partir de ese triste incidente, la organización Black Lives Matter tomó cartas en el asunto y saltó, como solo lo hacen esos que se han preparado de antemano para el salto, de una semioscuridad silenciosa al estridente estrellato de una protesta que fue radicalizada, palabreja que a ellos les encanta, para alebrestar a esa fracción de los jóvenes estadounidenses (hay gente para todo) que estuvieran dispuestos a salir a las calles a quemar, destruir, mentir, amenazar y crear el caos.

Otra prueba de que las dos protestas son copias casi idénticas es que en Chile una de las agitadoras de la misma fue, por solo citar un caso, la comunista Camila Vallejo. Una chiquilla bien conocida por sus fuertes vínculos con el Castro-Narco-Chavismo.


Como mismo la Vallejo tiene fotos mirando al asesino de Fidel Castro con ojitos de adoración, una de las organizadoras de las protestas en los EE UU tiene foto, con mirada de reto y puñito desafiante, con el asesino de Nicolás Maduro. A eso súmenle la declaración oficial de Black Lives Matter alabando al psicópata de Fidel Castro cuando falleció.

Todo esto explica por qué en los EE UU, como en Chile, no existió ningún llamado previo, por parte de esas organizadoras que se dicen entrenadas, a la no violencia o a la identificación de esta como una acción de elementos provocadores. Está claro que el objetivo siempre fue esa violencia.

Para seguir sumando similitudes, en Chile la oposición pro castrista maniató al presidente Piñera restringiendo, tanto como pudo, su capacidad de respuesta. Igual, en los Estados Unidos la élite pro castrista del Partido Demócrata se lanzó de inmediato a restringir, tanto como pudo, las opciones del presidente Trump para controlar las protestas.

Si en Chile los medios de izquierda se lanzaron enseguida a correr los bulos de que los policías estaban usando una fuerza excesiva; en los Estado Unidos los medios de izquierda, con la desvergüenza de CNN a la cabeza, se lanzaron a construir la falacia de un racismo sistémico que tiene más de culpa calvinista y de hipocresía protestante que de cualquier otra cosa.

Como en Chile, en los EE UU los objetivos de las protestas fueron la destrucción de la propiedad pública, de la pequeña propiedad privada, de los símbolos nacionales, religiosos y de las iglesias, así como la demonización de las fuerzas del orden público y de la legalidad.

Si los marxistas chilenos buscaron la parálisis legal mediante el reto a la Constitución, los marxistas estadounidenses buscaron el mismo objetivo mediante una absurda campaña encaminada al desfinanciamiento y la disolución de la policía.

Asombra poco, entonces, que ambos países hayan sido sobrevolados por el fantasma de una guerra civil que tiene más de deseos castristas que de posibilidad real.

Hasta aquí, cualquier alma bienintencionada puede argüir que la colusión de las protestas gringo-chilenas con el castrismo no pasa de ser una colusión ideológica que nada tiene que ver con el trabajo de la Inteligencia castrista. Solo se trata, podrían decir, de una comunidad de intereses.

Dejando a un lado que la Inteligencia castrista siempre ha sido el instrumento más importante y efectivo para la defensa y diseminación de la ideología marxista del régimen; hay un indicio que sustenta la idea de una interferencia en la política interna de los EE UU.

Me refiero al financiamiento de Black Lives Matter.

Desde hace ya varios días, muchas personas han estado divulgando que una de las fuentes de financiamiento de BLM fue la organización “Thousand Currents”.

Un vistazo a la declaración de impuestos de esa organización muestra, en su sección “Part IV”, que la vice presidenta de su junta directiva es nada más y nada menos que Susan Rosenberg, una terrorista convicta que durante muchos años militó, y sirvió como coordinadora, entre varias organizaciones terroristas (en los EE UU) de las que ya hoy se sabe, sin lugar a dudas, que fueron entrenadas y financiadas por la Inteligencia castrista.

El apellido Rosenberg (como los apellidos Gutiérrez, Blanco, Rieumont o Tabío en Cuba) es un apellido que en Norteamérica se asocia mucho con esas personas que decidieron (hay gente para todo) traicionar la democracia y las leyes de su país a favor de la ilegalidad totalitaria, las hambrunas, las purgas, los Gulags y los asesinatos en masa del comunismo soviético e internacional.

Para hacerle honor a su apellido, Susan Rosenberg sirvió de apoyo a las organizaciones terroristas “Weather Underground” y “Black Liberation Army”. En ese papel una de sus misiones fue ayudar en la fuga de JoAnne Chessimard (hoy conocida como Assata Chakur), la terrorista y asesina estadounidense que todavía hoy vive en Cuba protegida por la Inteligencia castrista. Dime cuál es tu santuario y te diré para quién trabajas.

Además, Susan Rosenberg militó en la “Organización Comunista 19 de mayo”, una colección de células terroristas que, según la versión oficial, debió su nombre a la coincidencia en las fechas de nacimiento de Ho Chi Minh y Malcom X.

Ya hoy está claro que ese nombre fue escogido para esconder la filiación castrista de esa organización, una filiación que ya ha sido más que comprobada y que estuvo sugerida, en su momento y para los que supieran, en el hecho de que esa es también la fecha de la caída en combate del prócer cubano José Martí.

En el año 1984, Susan Rosenberg fue detenida con un camión cargado con cientos de libras de material explosivo, armas e identificaciones falsas. La señora decidió no cooperar con la justicia de su país, optó por no hablar de sus manejadores castristas y fue condenada a más de cincuenta años de prisión. Todavía debería estar cumpliendo condena; pero en su último día como presidente Bill Clinton, quién lo diría, la dejó en libertad.

Ahora reaparece Susan Rosenberg como la vicepresidenta de una organización que se encargó, entre otras cosas, de la financiación de Black Lives Matter. Podría parecer una tontería, podría pensarse que si la Inteligencia castrista estuviera detrás de las protestas no le convendría, para nada, que una persona vinculada a estas pudiera ser acusada de tener vínculos previos con ellos.

Hay dos argumentos en contra de esa idea. Uno es que a veces, cuando se busca la intimidación previa a una posible negociación, sí conviene insinuar una pertenencia que después puede ser utilizada como un elemento de regateo. De más está decir que si algo le interesa al castrismo en estos momentos es negociar.

La otra idea es que las financiaciones siempre son el elemento más importante y vulnerable, desde el punto de vista táctico y estratégico, de esas campañas de influencia en la política de otro país. Eso implica que, a pesar de las sospechas que puedan desatar, esas financiaciones tienen que ser controlados por personas de absoluta confianza, personas que hayan demostrado con años de cárcel, por ejemplo, su renuencia a hablar de sus manejadores.

Con todo esto como referencia, y otros elementos que no caben por razones de espacio, cuesta mucho trabajo entender que la comunidad de Inteligencia de los Estados Unidos, y el FBI, no hayan impedido una incitación a la violencia en un país de leyes, como los EE UU, para defender al régimen de un país sin leyes que es controlado por una banda de asesinos que llegó al poder, precisamente, mediante la violencia y el terrorismo.

Quizás es que estaban muy ocupados creando un expediente de falsas acusaciones contra un presidente limpia y democráticamente elegido.

Tomado de: https://reynelaguilera.wordpress.com/2020/07/14/black-lives-matter-y-la-inteligencia-castrista/

viernes, 14 de febrero de 2020

"Cuba" Boteros de toda la Isla se declaran en huelga como medida de presión

'La posición de las autoridades ha sido la de dejar hacer', dice un vocero de la Asociación Cubana de Transportistas Autónomos (ACTA)

Piquera de taxis privados en Cuba.
Piquera de taxis privados en Cuba. DIARIO LAS AMÉRICAS

Los transportistas privados cubanos dieron a conocer un pliego de demandas al Gobierno como medida de presión para regresar con normalidad al trabajo, tras la puesta en vigor este mes de nuevas regulaciones para el transporte de pasajeros.
Una lista de cinco exigencias fueron hechas públicas el jueves por la Asociación Cubana de Transportistas Autónomos (ACTA) en La Habana, Mayabeque y Artemisa, de acuerdo con el reporte de Radio Televisión Martí, que incluyen autorizar la libertad de movimiento para los taxistas privados; aprobar una sola licencia operativa de pasajeros; que se les permita trabajar en todo el país, incluidas las zonas turísticas, y se les autorice adquirir una cantidad de combustible según el consumo; además de poner fin al tope de precios decidido por el Gobierno.
"Cerca del 70 u 80% [de los choferes] no está trabajando para tratar de lograr que el Gobierno se siente a negociar, a buscar una alternativa. Hasta ahora no ha habido ninguna respuesta a las demandas", dijo Esteban Hernández González, coordinador en la región occidental de la Coalición de Cuentapropistas de Cuba, de la cual es parte la ACTA.
El 1 de febrero pasado, comenzó a aplicarse un nuevo ajuste en las normas de funcionamiento del transporte privado, que desde 2018 ha sufrido varios "experimentos", prohibiciones y cambios dispuestos por las autoridades. 
A partir de esa decisión, los taxistas en La Habana están obligados a cobrar un máximo de diez pesos (CUP) por pasajero para los vehículos de hasta 14 pasajeros, y hasta cinco para camiones y camionetas. Esas tarifas rigen durante todo el día y para cualquier recorrido, con algunas excepciones.
Hernández González dijo que es visible una disminución de la represión en contra de los transportistas en servicio. "La posición de las autoridades ha sido la de dejar hacer: no hay inspectores prácticamente hoy en las calles y la Policía no está parando los carros, como al principio lo hicieron, porque saben que la situación se va de su control", añadió.
A menos de una semana de la entrada en vigor de las nuevas regulaciones, la prensa oficial reportó que los inspectores estatales había aplicado multas por un valor de 35.000 pesos. Las sanciones fueron por violaciones de precios, actividad económica ilícita, exceso de personas, acortamiento de los tramos, entre otras violaciones, y supusieron que se retiraran 25 licencias operativas y se ocuparan otras 56 a choferes que no las habían renovado.
"Si usted recorre los puntos de control de la capital con las provincias, se da cuenta de la concentración de población que hay. Más del 80% de esa demanda de transporte se cubría sobre la base del transporte privado", aseguró Hernández González.
El activista aseguró que la medida de presión ha sido difícil de acatar por los propios implicados. "Algunos transportistas nos han planteado: 'mira, vamos a trabajar al menos días alternos, porque la familia tiene que vivir'", refirió.
"Tenemos en cada provincia alrededor de 40 transportistas que están vinculados a ACTA. Tienen una estructura, seleccionan a sus representantes, a su coordinador. A veces hacemos consultas directas y a veces hacemos consultas a través de estos coordinadores", explicó.
El reporte indicó que también en las provincias de Cienfuegos, Villa Clara, Holguín, Sancti Spiritus y Santiago de Cuba los taxistas privados se han sumado a la medida de presión. 
Las anteriores restricciones impuestas a los boteros provocaron desde huelgas de brazos caídos de los choferes hasta la entrega de las licencias por parte de muchos, así como un aumento de precios que impactó a la población en un país donde el transporte público no consigue satisfacer las necesidades. 
Falta ver si con las escasez actual de combustible en las gasolineras que sufre Cuba y ha dado lugar a largas colas para abastecerse, la medida tiene el efecto deseado.
Según datos oficiales, hasta septiembre de 2019 estaban registrados como trabajadores privados 617.974 personas, la mayor parte (160.206) asociados al transporte y la elaboración y venta de alimentos.
Tomado de: https://diariodecuba.com/cuba/1581677308_10953.html