Un reportero y pastor, desde la isla, considera necesario distribuirlas: la desnutrición que encontró en un asilo de ancianos no se puede expresar con palabras
Por: Manuel Alberto Morejon
La Habana/ 12-9-2014
El mes de julio pasado, en visita al asilo de ancianos “Juan le Font”, en el municipio habanero del Cerro, pastores de un ministerio cristiano nos entrevistamos con parte de la directiva del asilo, para presentarle a posibles patrocinadores de un proyecto humanitario, y así gestionar una ayuda alimentaria para los internados en el hospicio.
Nos sorprendió que dijeran que ellos no podían recibir directamente donaciones, pues esa gestión había que realizarla a través de las instancias superiores, las cuales se encargarían de distribuir la donación según estimaran conveniente.
Después de 14 meses de visitas periódicas a este centro, y de comprobar que la situación alimenticia de los ancianos es la misma, el pasado sábado 6 de septiembre fue entrevistada por este reportero una de las trabajadoras del centro (la cual solicitó su anonimato por razones de seguridad).
Ella cobra un salario de 516 pesos al mes, cuyo equivalente es de menos de $21.00 USD. Dijo que lo mismo tiene que hacer de asistente de enfermería, de limpieza que de todo lo que se le solicita, pero que ella no tiene nada que ver con la elaboración de los alimentos, y mucho menos con la cantidad de comida que se les da a los ancianos.
La secuencia de fotos mostrada arriba puede hablar lo que con palabras no se puede expresar.
Fotografías de Manuel Alberto Morejón, tomadas el pasado 6 de septiembre en el hogar de ancianos “Juan le Font”
Fuente: Cubanet.org